Feliz día del libro 2020

Un año hace desde que abrí mi blog con este propósito de compartir mis mas preciadas lecturas con todo aquel que quisiera adentrarse dentro de mi mundo. Gracias!

El amor huele a café.

Mientras estoy escuchando una de las canciones de la banda Fobia: Vivo, se me muestra, latente la novela de El amor huele a café. Porque el amor es sentirse vivo, porque el café nos da la vida al comenzar un nuevo día. Porque el aroma nos transporta a recuerdos que nos dejan esa grata satisfacción que deja el café de la mañana.

Amar es comenzar una nueva vida, nos desarmamos en la sensaciones que nos traspasan y nos dirigen hacia nuevos mundos. Se nos acrecientan los sonidos, los sabores, los olores. Y todo ello nos hace ser mejor persona porque amamos. Porque importamos. Porque la soledad se quedó a un lado, sin intervenir en esta historia.

Amar es un amalgama de colores vívidos que nos hace perdernos en ellos con la certeza de estar siguiendo el mejor camino.

En El amor huele a café de Nieves García Bautista, se nos muestran las distintas formas, las distintas caras del amor reflejadas en un hijo, en un amor olvidado, aquel amor inalcanzable, el que nos produce rencor, el que ni si quiera llega a serlo.

Y cuando eres consciente de que todo va a salir bien, estás apoyada en la barra de tu cocina con la taza caliente de café en las manos, tus piernas cruzadas entre sí e inspiras breve pero intensamente y te viene ese pensamiento: ¡qué bien huele el café!.

El café como el amor hay que saborearlo en cada sorbo, deleitarnos en el sabor amargo y dulce que nos proporciona y saber que, al día siguiente, nos seguirá esperando para volver a hacer de ese instante el mejor.

Amar es liberar. Amar es sentirse vivo (Fobia).

Los crímenes azules

Las apariencias engañan”.

Las apariencias nos definen como una mera tarjeta de visita, como el folleto que se deja olvidado en el parabrisas de un coche, como la publicidad de cualquier producto deseoso de ser adquirido.

Nos dan la oportunidad de vendernos, de dejarnos elegir entre una multitud que, sin ir más lejos, también los evidencia esa necesidad constante de sobrevivir. Cuál etiqueta, nos pueden llevar a lo más alto o, por el contrario, dejarnos caer sin piedad.

Cuando viajamos en metro, autobús, tren, nos vemos rodeados de gente que, sin haber cruzado una palabra, un gesto con ellas, nos atrevemos a formarnos una historia para completar la imagen que nos proyectan. A veces, coinciden. La mayoría ni si quiera se acerca lo más mínimo.

En Los crímenes azules de Enrique Laso, Ethan Busch, agente especial de análisis de conducta, deberá resolver uno de los casos más sonados: dos cadáveres encontrados de manera casi simultánea, dos historias distintas, entrelazadas por un suceso atroz.

Se dejará el agente Busch guiar por las apariencias o, en su caso, llevará el caso hasta el extremo exprimiendo cada gota para, así descubrir la verdad?

Reconocerás las apariencias y sabrás desentrañar su lenguaje? Descúbrelo.